La cosa cambia cuando se trata del tiempo, de los días o de los años. Llega la navidad y con ella el año nuevo, una noche que de pronto se convierte en una lavadora gigantesca y colectiva. Los minutos y las horas pasan día tras día, implacables por nuestras biografías, pero por arte de magia la noche vieja se convierte en un estreno de todos,
de norte a sur y de este a oeste nos van mostrando en los telediarios cómo los humanos de todos los rincones del planeta van celebrando este reestreno del tiempo. Entre gritos y pitos, los españolitos, enormes, bajitos hacemos por una vez algo a la vez. Una gran manifestación con mayorías nada silenciosas. Es de las pocas experiencias que nos unen a casi todos los habitantes del planeta, bebemos y comemos, más o menos en buena compañía, para celebrar que algo empieza. Un nuevo día y sale el sol, algo que no es distinto de cualquier amenecer y aún así nos hace sentir dueños de
Andrés Orts |
Para cada cual hay otro día 1 de otro mes que es su año nuevo, su resurgir. Ese es el sentido que para mí tiene el día de mi cumpleaños. Es mi año nuevo y mi noche vieja. Celebrar un año más y 365 nuevos días para vivirlos.
Mientras nos van pasando cosas, cambian las circunstancias y tenemos vivencias que hacen que cambien los cristales de tu prisma. O quizás solo cambie la posición del trípode donde lo apoyas. El caso es que lo que te va ocurriendo y cómo lo afrontas, sumado a sus consecuencias va haciendo de ti lo que eres ahora. Todo va rodando, día tras día. Y cuando no lo esperas una de esas páginas en blanco se escribe sola y aparece una nueva noche vieja y día de año nuevo que no tenías planeado. Porque no siempre es verdad lo que dicen las frases de autoayuda: "será lo que quieras" "Proponte algo y ocurrirá" porque la vida a veces tiene planes para ti. Y Ta-chán! te da una ostia que te da la media vuelta. Puedes salir de ahí (o no) y poner otra marca en el libro en blanco del año y pico mil. Otro día marcado como año nuevo. Para estrenar vida y para celebrar.
Joan Castejón |
Hay quien piensa que las cosas ocurren por sí y que todo tiene un significado. Incluido accidentes o enfermedades. Es sólo una forma de adjudicar al destino la necesidad de aprender de todo lo que nos sucede y sacar conclusiones positivas. (No hay mal que por bien no venga)
Son tiempos chungos, mucha gente está triste, es pobre, está desanimada y ronda por el aire una desesperanza colectiva, apatía y mucha ira. Por eso circulan a todo trapo las frases de autoayuda, pensamientos inspiradores lo llaman, están por el fb, el twitter, estos días por el whatsapp y se multiplican los blogs y las webs que quieren ayudarte a ser mejor persona, que ayudan a gestionar tu tiempo para el liderazgo, te enseñan qué es la empatía y cómo tener inteligencia emocional. Se propagan con el ánimo de darte apuntes y chuletas para el examen y muchas veces provoca el efecto contrario de frustración. Pero ya sabes, no existen fracasos, sólo resultados.
Joaquín Gallego |
Con la que está cayendo no nos viene nada mal a quienes habitamos el primer mundo un refuerzo para sobrellevar algunas cosas. Hay demasiadas piedras en el camino y hay que levantarse cada vez que algo no sale bien, cuando entramos a sumar los números del paro, sube la luz hasta que la tengas que apagar, el negocio te va fatal porque el dinero no rula y reforma a reforma parece que esto no tenga mucha solución. Entonces piensas que quizás lo esencial es invisible a los ojos, pero con la tripa vacía te cuesta concentrarte. Que todo te viene del revés y ni siquiera entiendes aquello de que la felicidad está en el camino y no en el resultado.
Miles de frases fáciles para sacarnos de boquete, pero sólo nosotros podemos salir. La Iglesia también tiene sus mantras, sus "Caminos" a la felicidad y te dicen qué debes hacer y qué no para encontrar la paz espiritual y no tener esas culpas y remordimientos que podrás cambiar por el perdón, la redención y el cielo.
Por otro lado está el coaching y gente orientándote hacia la excelencia con pautas sobre lo que tienes que hacer, comprar y comer. Entrenamiento personalizado para ayudarte a ser quien tú quieras ser.
No hay recetas, no existen fórmulas para alcanzar la felicidad (o la autoestima, o caer simpático o un elixir de amor). Y creer lo contrario puede provocar una gran frustración. Pero si las frases que hablan de ilusión, potencial, felicidad, emprender, superación, metas, motivación, éxito o actitud te vienen bien y te ayudan a conseguir lo que quieres, entonces adelante. Pero cuidado, la vida puede ser eso que ocurre mientras lees libros de autoyuda.
Estrena año a cada momento. (No es una frase de autoayuda)
Enlaces:
InspirARTE by MaximoPotencial
"La vida no te está esperando en ninguna parte, te está sucediendo" by Culturizando
Vídeos que vienen al caso:
"Un año más" by Mecano
"Vivir mi vida" by Marc Anthony
"Que bonita es esta vida" by Jorge Celedón
"You´re the voice" by John Farnham
"We are the Champions" by Queen
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